En esta ocasión, la canción que ofrecemos es un célebre poema del mayor sufí de todos los tiempos, el murciano Ibn al-`Arabi (1165-1240), extraído de su obra "Turyumán al-ashwaq" (El intérprete de las pasiones). Cada línea marca un hemistiquio de los dos que componen cada verso:
1- Mi corazón se ha vuelto capaz de acoger todas las formas 2- Es pradera para las gacelas, monasterio para monjes 3- Templo para ídolos y Kaaba del peregrino 4- Tablas de la Torá y Libro del Corán 5- La religión que profeso es la del Amor y sea cual sea el rumbo que tome 6- su montura, el Amor es mi religión y mi fe.